Académico presentó la ponencia “Fishing with Hannah Arendt: redemptive narrative and narrative for understanding in the field of law and literature”.
El profesor de la Escuela de Derecho de la Universidad de Valparaíso Camilo Arancibia, participó recientemente en el coloquio “Justice as translation and counter-storytelling”, llevado a cabo en la Universidad de Coimbra, Portugal.
La jornada fue organizada por el Instituto Jurídico, la Italian Society for Law and Literature y la ATFD (Associação Portuguesa de Teoria do Direito, Filosofia do Direito).
En la instancia, el académico presentó la ponencia “Fishing with Hannah Arendt: redemptive narrative and narrative for understanding in the field of law and literature”, donde estudia las dos principales tareas del movimiento de Derecho y Literatura: “ellas son, entre otras, hacer visible al sujeto que no ha sido visibilizado en el Derecho y, luego, someterlo a problematización”.
“Donde la Ilustración muestra un sujeto abstracto, descarnado, la literatura puede ayudar a mostrar al sujeto situado que ha sido marginado y mostrarlo en su vínculo con el mundo. En ese sentido, utilizo las reflexiones de Hannah Arendt sobre la narrativa y la comprensión redentoras. Para abordar la narrativa redentora, me sirvo de un estudio de la filósofa turca Seyla Benhabib donde señala que la figura de Arendt como ‘narradora’ busca ‘redimir la memoria de los muertos, los vencidos y los vencidos, haciendo presente una vez más sus esperanzas fallidas’”, añadió.
“En cuanto al uso de la narrativa para la comprensión, analizo lo que señala Lisa Disch: ‘La narración trágica no sirve para cerrar problemas sino para plantearlos, y para inspirar el pensamiento crítico espontáneo…’ Para resaltar ambas modalidades del uso narrativo de Arendt, me refiero al sujeto jurídico frente a los campos de concentración y, luego, frente al desafío del cambio climático”, puntualizó.
El académico explicó además que en el evento se pudo escuchar a quienes se han erigido como fundadores del Derecho y Literatura en el mundo, James Boyd White (EE.UU.) y Francois Ost (Bélgica).
