La Escuela de Derecho de la Universidad de Valparaíso suscribió recientemente un convenio con el Centro de Arbitraje y Mediación de la Cámara Regional de Comercio y la Producción (CRCP) de Valparaíso, en acto que se realizó en dependencias de ese organismo gremial.
A esta sencilla pero significativa ceremonia, asistieron el presidente de la CRPC, Jorge Martínez Durán; el presidente del Centro de Arbitraje y Mediación de la CRCP, Waldo del Villar; el decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad de Valparaíso, Alberto Balbontín Retamales y el director de la Escuela de Derecho, Ricardo Saavedra Alvarado.
El fin del convenio es que los alumnos de último año de la carrera de Derecho, puedan efectuar pasantías en el Centro de Arbitraje y Mediación para aprender la manera en que las soluciones alternativas de conflictos operan en la práctica, prestando asesoría a los usuarios que no tengan los recursos para financiar a un abogado particular, lo que constituye un valioso servicio para la comunidad.
Uno de los resultados finales buscados a través de este acuerdo es que los futuros abogados se interioricen en la conveniencia de los sistemas alternativos de conflicto como alternativa a los tribunales ordinarios, para poder en el futuro impulsar, con mayor fuerza en la región, este sistema altamente satisfactorio para la solución de conflictos entre partes.
Durante el acto de firma del convenio, el decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad de Valparaíso, Alberto Balbontín, manifestó su satisfacción por poder concretar esta alianza estratégica, pues según dijo “permitirá que como universidad podamos contribuir a que personas que no tienen acceso a resolver conflictos no procesalmente, lo hagan y se vean beneficiadas”, agregando que además, los estudiantes pasantes lograrán impregnarse de una experiencia diferente a los sistemas tradicionales basados en el litigio.
Por su parte, el presidente de la CRCP, manifestó que “es un honor suscribir este convenio”, acotando que “el mundo ha cambiado mucho y el modo de vincularse con la sociedad también. La vida universitaria antes se desarrollaba intramuros y se perdía el vínculo con la comunidad, pero ahora es distinto y este convenio es un claro ejemplo de la labor social que ahora desarrollan las universidades, lo que a su vez da la oportunidad de que el mundo empresarial también mire a su entorno y abra sus puertas a los aportes que nos puede entregar la academia”.
