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UV entregó grado de Doctor Honoris Causa al jurista y académico Claudio Grossman en inauguración de año académico de Derecho

La ceremonia fue presidida por el rector de la UV, Aldo Valle Acevedo.

En una solemne ceremonia que tuvo lugar en el Aula Magna “Victorio Pescio Vargas” de la Facultad de Derecho, la Universidad de Valparaíso entregó el grado de Doctor Honoris Causa al destacado jurista y académico Claudio Grossman Guiloff. La distinción fue entregada en el marco de la Inauguración de Año Académico de la Escuela de Derecho de la UV, oportunidad en que se da la bienvenida oficial a los 149 nuevos estudiantes de la carrera, quienes que recibieron la decimonovena edición de la Constitución Política de la República de Chile, colección 2019.

El acto fue encabezado por el rector Aldo Valle, quien fue acompañado por el secretario general de la UV, Osvaldo Corrales; el decano de la Facultad de Derecho, Alberto Balbontín; el director de la Escuela de Derecho de la UV, Claudio Oliva; y la presidenta de la mesa directiva del Centro de Estudiantes de Derecho, Camila Letelier.

El acto contó asimismo con la presencia del contralor interno de la Universidad de Valparaíso, Cristián Moyano; el decano de la Facultad de Medicina UV, Antonio Orellana; el decano de la Facultad de Ciencias del Mar, Ricardo Bravo; la secretaria de la Facultad de Derecho UV, Inés Robles; la secretaria académica de la Escuela de Derecho UV, Claudia Cozzani; el presidente del Colegio de Abogados de Valparaíso, Alejandro Gómez; el auditor general de la armada, Contraalmirante Cristián Araya; diversas autoridades de la Universidad de Valparaíso, además de profesores, invitados especiales, familiares y estudiantes.

Inauguración Año Académico Escuela de Derecho UV

La presidenta de la mesa directiva del Centro de Estudiantes de Derecho UV, Camila Letelier, tomó la palabra para saludar a la comunidad y especialmente a los nuevos estudiantes. “En este lugar, donde pasarán buena parte de sus días, durante un tiempo, se verán nutridos de nuevos y bellos conocimientos, conocerán personas maravillosas, se superarán a ustedes mismos día a día y se sumergirán en la tan efervescente vida universitaria, la cual consiste en algo mucho más profundo que venir a estudiar. Estudiar y ser una o un estudiante universitario es crear lazos, mirar las cosas desde un punto crítico, luchar por lo que creemos correcto, organizarse y participar en diversas instancias”, indicó.

Posteriormente, el director de la Escuela de Derecho UV, Claudio Oliva, entregó una distinción a la estudiante de primer año Fernanda Liapiz, quien obtuvo el mejor puntaje de los seleccionados del año 2019 matriculados en la carrera, lo que la hace acreedora de la Beca de Honor de la Universidad de Valparaíso.

Por su parte, el decano de la Facultad de Derecho, Alberto Balbontín, dio la bienvenida a los nuevos estudiantes indicando que “nuestra escuela los acoge con afecto, y con la certeza de que encontrará en ustedes personas que sabrán valorar el privilegio que la sociedad les ha brindado, de alcanzar la etapa de estudios superiores, para convertirse en profesionales preparados para enfrentar el desafío de defender los derechos de quienes depositen su confianza en ustedes para tan delicado compromiso. Ello significa que su primer deber como universitarios, es enfrentar responsablemente la formación jurídica y también cívica que nos comprometemos a entregarles, con la convicción de que la debida formación profesional irá en directo beneficio de las personas que mañana confiarán en sus competencias, para obtener el respeto y tutela de sus derechos”.

“Les deseo una feliz y fructífera estadía en nuestra escuela, donde no solo estudiarán y aprenderán los elementos básicos de esta área de la cultura que es el Derecho, sino que también conocerán un modo de convivencia muy propio de estas aulas, caracterizado por el rigor académico, dentro de un clima de pluralismo y respeto al otro en sus opciones jurídicas, científicas, filosóficas, religiosas, etc., y donde procuramos que la intolerancia y el fanatismo sectario, queden fuera de los muros que nos acogen”, cerró.

Investidura Doctor Honoris Causa

El decano Alberto Balbontín fue el encargado presentar los méritos Claudio Grossman, mientras que el secretario general de la UV, Osvaldo Corrales, estuvo a cargo de leer el decreto 1273, que consagra el nombramiento del jurista como Doctor Honoris Causa.

En la oportunidad, Alberto Balbontín indicó en su discurso que “su energía, su capacidad de trabajo, sus múltiples y diversos focos de interés, y su compromiso con aquellos temas que convocan su atención, se han traducido en decenas de actividades de diversa índole, que cubren a lo menos tres ámbitos de su acción profesional”.

“ El estudio y desarrollo del Derecho Internacional, vertido en numerosos trabajos contenidos en libros de texto, destinados a la enseñanza de esa rama del derecho, y en artículos publicados en numerosas revistas especializadas. El ejercicio profesional, donde ha asumido la defensa de causas, tanto de DD.HH., como de intereses nacionales. La más importante de estas últimas, sin dudas, fue la defensa de los intereses de nuestro país, en la singular demanda que entablara un país limítrofe en contra de Chile, y cuya defensa fuera brillante y exitosamente liderada por él. Y en el campo de la docencia universitaria, en que se destaca su vivo interés por la formación de los nuevos abogados en la defensa y promoción de los DD.HH. Con todo, no se puede dejar de mencionar su muy extraordinaria gestión como Decano por más de 20 años, de la Facultad de Derecho de la American University en Washington, y que significó que se le nombrara Decano Emérito por dicha universidad. Tampoco se puede olvidar su permanente participación, cumpliendo siempre roles destacados, en organizaciones profesionales y académicas internacionales y de los EE.UU.”, añadió.

Tras entregar la medalla y el diploma que consagran la integración de Claudio Grossman al claustro de la Universidad de Valparaíso, el rector Aldo Valle hizo uso de la palabra, destacando que este hecho distingue a la institución, y que se basa los indudables méritos intelectuales y académicos del profesor Grossman, que se expresan en una dilatada y prolífica trayectoria académica y profesional, y que lo han hecho merecedor de una gran cantidad de premios y reconocimientos en Chile y el extranjero.

“Es un reconocimiento muy merecido y esperado por la universidad. Claudio Grossman inició sus estudios de pregrado en Derecho en esta casa de estudios, y estudió su enseñanza secundaria en un recinto de la educación pública cercano a este edificio, que es el Liceo Eduardo de la Barra, y por lo mismo tenemos vínculos entrañables”, inició la autoridad universitaria.

Además, agregó que “todos conocemos su desempeño, su compromiso cívico con los derechos humanos, con el derecho internacional de los derechos fundamentales y, por lo mismo, creemos que la universidad, al hacer este reconocimiento, lo que hace también es admirar y distinguir a un, en su momento estudiante de estas aulas, y luego a un jurista internacional que ha sido reconocido ampliamente, que el propio gobierno de Chile le encomendó una alta responsabilidad en una controversia jurídica ante el Tribunal Internacional de La Haya a la que fue llevado Chile, y también por su desempeño académico en Estados Unidos, que lo llevó a ser decano de la Facultad de Derecho de American University, y que ha estado permanentemente desempeñando altas funciones de nivel internacional”.

“Para nosotros es un orgullo y una gratificación poder distinguir y reconocer a Claudio Grossman con el nombramiento de Doctor Honoris Causa, que es finalmente la distinción más elevada que la universidad reserva para quienes no perteneciendo a su claustro, y han tenido desempeños descollantes en determinadas áreas del saber que la universidad cultiva, y cultiva precisamente en el más alto nivel, es decir, otorgando el grado de Doctor, en este caso se trata de una distinción académica que por razón de honor académico entregamos al destacado jurista”, cerró.  

Por su parte, Claudio Grossman agradeció el reconocimiento otorgado por la Universidad de Valparaíso, indicando que “me siento muy honrado, es una distinción que significa mucho para mí, por muchas razones. Y una bastaría: yo vengo de esta zona, estudié en el Liceo Eduardo de la Barra, y mis primeros años de formación jurídica los tuve aquí, en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile, en esa época. Luego me fui a Santiago, pero aquí se hicieron mis bases jurídicas y mi manera de ver las cosas, y aprecio tremendamente esas bases, siento que estuve toda la vida parado sobre hombros muy sólidos y, siendo más específico, era muy importante la diversidad de los estudiantes y profesores”.

“El hecho que haya un pluralismo en la composición de los cuerpos académicos, en los puntos de vista, de maneras de pensar, en la composición del estudiantado, y también el rigor en los estudios, para mí eso tiene un gran sentido emotivo. Además, me emociona volver aquí y ser objeto de este reconocimiento, que no lo veo como un reconocimiento hacia mí, sino a estas bases sólidas en las que he podido estar parado y desarrollarme”, cerró.

En la parte final de la ceremonia, Claudio Grossman dictó la clase magistral “El Derecho Internacional y su relevancia en el siglo XXI”, donde se refirió a los desafíos que persigue la disciplina en la actualidad.  

Al respecto, indicó que “los desafíos del Derecho Internacional en el siglo XXI tienen distintas características. Estamos viviendo un momento en que parece cuestionarse muchas cosas. Los hechos, la prensa, la solidaridad internacional que debe existir, la humanidad común de los seres humanos, y también se empieza a cuestionar el derecho, pues el derecho establece una limitación a la acción de la gente, y además reconoce algunos valores fundamentales, como que todos somos iguales ante la ley”, detalló.

“Estamos viendo en el Derecho Internacional tentativas a liberar, actores internacionales de los límites que establece la acción jurídica, entonces es muy importante reforzar la acción jurídica, con el objeto de tratar los temas contemporáneos: medioambiente, refugiados, amenazas a la paz, tener un comercio internacional equitativo, pero si no hacemos esas cosas, en instituciones y normas jurídicas, los resultados van a ser determinados por quien tiene más fuerza. De allí la importancia que tiene el reivindicar el derecho”.

“En esta tarea no somos ajenos, no somos espectadores. En la realidad contemporánea, la sociedad civil, los partidos políticos, los sindicatos, las organizaciones de mujeres, la gente en general tiene algo que decir, como se ha demostrado en numerosas iniciativas. El desafío es también un desafío individual. Actuar con tolerancia, con pluralismo, defendiendo esta idea de que todos podemos hablar, todos podemos decir cosas, y podemos canalizar nuestras aspiraciones a través de los sistemas jurídicos”, cerró.

Claudio Grossman

Claudio Grossman es Abogado y Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales por la Universidad de Chile, y Doctor en Ciencias del Derecho por la Universidad de Amsterdam. Actualmente es decano emérito de Washington College of Law de American University. Dentro de su nutrida trayectoria como experto en Derecho Internacional, se destaca su participación como miembro de la Comisión Interamericana de Derecho Humanos entre 1993 y 2001, la que presidió en dos ocasiones, en 1996 y 2001. También fue presidente del Comité contra la Tortura de la Organización de las Naciones Unidas.

En su labor académica ha tratado materias tan diversas como la pobreza y asuntos de género. El profesor Grossman es autor de numerosas publicaciones sobre Derecho Internacional, organizaciones internacionales y Derechos Humanos, y ha sido considerado entre los 25 nombres más influyentes en educación jurídica en Estados Unidos. Además, ha recibido numerosos premios en Chile y el extranjero por su trabajo con los Derechos Humanos y el Derecho Internacional.

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